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Nuestros sabios agregaron la prohibición de comer carne con leche, aunque no hubiesen sido cocidos juntos. Esto y más, establecieron que después de haber ingerido una comida cárnica o con sabor a carne, nos abstengamos de comer leche o una comida con sabor lácteo. En la mayoría de las congregaciones se acostumbra a esperar seis horas entre carne y leche, y algunas de las personas de origen ashkenazí esperan únicamente tres horas o incluso una sola. En el caso de niños o personas enfermas que precisan consumir leche tras haber ingerido carne, aunque su costumbre sea esperar seis horas, en caso de necesidad pueden proceder de acuerdo con las opiniones más flexibles. Tras comer leche, se puede ingerir de inmediato carne a condición de limpiar la boca de los restos de leche por medio del cepillado de dientes o la ingestión de un alimento parve y algo de bebida. En caso de haber pasado una hora desde la ingestión de leche, no es necesario enjuagar la boca antes de comer carne.
