Está prohibido cocinar carne con leche, y si esto ocurrió, tanto la carne como la leche quedan prohibidos tanto para su consumo como para la obtención de cualquier beneficio. Esta prohibición es especial y difiere de las demás limitaciones dietéticas, ya que los demás alimentos prohibidos están vedados siempre, mientras que tanto la carne kasher por separado como la leche por separado son kasher, queda absolutamente prohibida su cocción conjunta, y en caso de haberla realizado se aplica una prohibición grave (isur jamur), ya que quedan vedadas tanto para la ingestión como para obtener de ellas cualquier beneficio. Esto es, además de prohibir comerlas, se prohíbe obtener beneficio de su venta o de su entrega a un gentil a modo de presente.
En la cocina en la que se preparan alimentos cárnicos y lácteos deben destinarse utensilios de cocina separados para cada tipo de producto, y es correcto que exista entre estos una diferencia notoria para que no sean confundidos. Asimismo, es necesario poseer juegos separados de platos, cubiertos y fuentes para carne y para leche, de modo tal que no se ingiera por error leche con restos de carne o viceversa.
Quien cocina un alimento lácteo en un recipiente cárnico o viceversa, este resulta prohibido. Sin embargo, si esto ocurrió por error, el estatus del alimento cocido depende de su sabor, si se percibe el del otro tipo, se prohíbe, y si no es perceptible, se autoriza.