Es preceptivo fijar o establecer una fiesta alegre y plena de alabanza a D's en el día en el que el pueblo de Israel fue salvado, tal como lo hicieron nuestros sabios para todas las generaciones en los casos de Purim y Janucá. Por lo tanto, es preceptivo celebrar Yom Ha'Atzmaut por medio de un rezo festivo, vistiendo ropas elegantes y llevando a cabo una comida preceptiva (se'udat mitzvá). Es también preceptivo recitar el Halel en Yom Ha'Atzmaut por la salvación que nos prodigó HaShem.