Es preceptivo por la Torá recitar el Shemá por la noche y por la mañana, y asimismo, también lo es recordar la salida de Egipto tanto de día como de noche. Nuestros sabios agregaron el recitado de dos bendiciones antes y dos después del Shemá, tres de estas son similares o paralelas a las que se dicen en Shajarit y una cuarta, Hashkivenu ('Ayúdanos HaShem a irnos a dormir en paz'), en la cual le pedimos al Eterno que nos cuide por la noche y durante el sueño.
En un inicio, el rezo de Arvit fue establecido como opcional y no como obligatorio. Sin embargo, a lo largo de las generaciones los hombres acostumbraron a rezar Arvit, hasta que en el medioevo (tiempo de los rishonim) ya era considerado un rezo obligatorio para estos. A pesar de ello, en Arvit no se dice la repetición del oficiante ya que como en su origen y fundamento era opcional no se tuvo el recaudo de establecer una repetición para hacer cumplir a quienes no saben rezar.
El tiempo del recitado nocturno del Shemá es desde que salen las estrellas, esto es, desde que es dable ver tres estrellas en el firmamento. El horario exacto de cada día viene impreso en los almanaques. A priori, se debe recitar el Shemá y rezar Arvit hasta la medianoche, y a posteriori se puede toda la noche.
En estos capítulos nos ocupamos de los fundamentos del rezo, sin embargo, sus detalles deben estudiarse directamente del libro de oraciones.