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En las bendiciones y las plegarias que recitamos a diario alabamos y agradecemos a HaShem por el mundo maravilloso que creó para nosotros. Además de ello, a veces nos encontramos con vistas excepcionales, emocionantes y admirables, y a los efectos de poder expresar el valor que estas encierran, nuestros sabios dispusieron que bendigamos al contemplarlas y de ese modo las conectemos con su raíz espiritual. Para recitar las bendiciones por las vistas especialmente bellas deben cumplirse dos condiciones: 1) Que la vista resulte especial y despierte admiración en la mayoría de las personas. 2) Que quien la recite no haya contemplado esa vista durante treinta días, pues entonces la vista genera una especial emoción.
Paisajes impactantes: Quien divisa mares, lagos, ríos, geiseres, cataratas imponentes, desiertos, montañas y colinas especialmente llamativas recita: 'Baruj Atá HaShem Elokeinu Melej Ha'Olam Osé Ma'asé Bereshit' (Autor de la obra de la Creación). Quien ve simultáneamente varios paisajes, por ejemplo, si contempla el mar y una montaña impresionantes bendice una sola vez por ambos. Sin embargo, si ve un paisaje tras otro, recita una bendición por cada uno de ellos.
Quien divisa el 'gran mar', o sea, el océano que rodea a todos los continentes recita: Baruj Atá…She'asá et Hayam Hagadol' (Hacedor del océano). Por un lago que se formó a causa de la construcción de un dique hecho por la mano del hombre no se recita bendición alguna, pues las berajot fueron instituidas solo para alabar la obra de HaShem.
Fenómenos naturales: Por fenómenos maravillosos y estridentes tales como terremotos, erupciones volcánicas, eclipses solares o lunares, cometas que surcan el firmamento o estrellas fugaces, que son meteoritos que al entrar en contacto con la atmósfera se incineran y su luz brilla, o por vientos especialmente tempestuosos, se recitan una de estas dos bendiciones: 'Baruj Atá... Shekojó Uguevurató Malé Olám' (Que Su poder y Su potencia colman el mundo) o 'Baruj Atá… Osé Ma'asé Bereshit' (Autor de la obra de la Creación). Por algo impresionante es preferible 'Osé Ma'asé Bereshit' y por algo que produce temor 'Shekojó Uguevurató'. Por ello, al contemplar un rayo se recita 'Osé Ma'asé Bereshit' y al escuchar un trueno 'Shekojó Uguevurató'. Quien ya haya bendecido en el correr de la jornada por rayos y truenos no volverá a hacerlo en ese día.
