El precepto de encender velas de Janucá Agradecimiento y alegría La luz que ilumina las tinieblas – la Torá Oral Los logros espirituales para todas las generaciones Crisis en la familia de los jashmonaím La revuelta de los jashmonaím El reino heleno y sus decretos adversos
- Shabat y festividades - Shabat y festividades -

Las velas

2 minutos para leer

Las velas

Todos los aceites y todas las mechas son aptas para el encendido de las velas de Janucá, y en la medida en que la vela da mejor luz, más excelente resulta. Hay quienes tienen el recaudo de encender velas de cera o parafina cuya luz es fuerte y bonita. Hay quienes lo hacen con excelencia empleando aceite de oliva, cuya luz es diáfana y rememora el milagro de la jarra en el Templo. Es necesario que las velas contengan material ígneo que pueda arder al menos durante media hora. Quienes cumplen con excelencia preparan velas que ardan dos horas y más.

Corresponde encender las velas con excelencia en una janukiá bella. Quien carece de una puede adherir las velas de cera sobre una superficie plana y encenderlas allí. Es preciso tener el recaudo de espaciar las velas entre sí para que cada una se vea separadamente.     

El shamash: Muchos acostumbran a encender una vela suplementaria llamada 'shamash' (en hebreo 'servidor' o vela utilitaria) y la ubican junto a la janukiá para que en caso de necesitarse luz se utilice la suya y no la de las velas que están destinadas a cumplir el precepto y de cuya luminosidad está prohibido disfrutar. Sin embargo, cuando en una habitación hay iluminación eléctrica no es necesario usar shamash, y a pesar de ello muchos acostumbran a emplearlo para poner de manifiesto la diferencia entre las velas preceptivas cuya luz no podemos usar y la del shamash cuya luz sí se permite emplear.

Lámparas eléctricas: No se debe cumplir el precepto con lámparas o focos eléctricos porque carecen de mecha y material inflamable o combustible, y además, las velas deben asemejarse a las del Templo. En caso de que alguien carezca de velas aptas, que encienda lámparas eléctricas sin recitar las bendiciones correspondientes. Hay quienes acostumbran a emplazar janukiot grandes en espacios públicos con lámparas eléctricas cuya luz se divisa a gran distancia, y si bien por este medio no se cumple con el precepto, tiene la virtud de que publicitan el milagro de Janucá.

Dónde encender Dónde encender El momento del encendido Encendido en la sinagoga y en sitios públicos El 15 de Shvat – Año nuevo de los árboles frutales