Leyes referentes al envío de porciones y a la entrega de presentes a los menesterosos El envío de porciones Presentes para los menesterosos Disfraces El significado del precepto de beber Cómo cumplir con el precepto de beber Los preceptos de beber, alegrarse y realizar el banquete festivo La alegría y la generosidad La lectura de la Meguilá La festividad de Purim El tiempo de celebración de las ciudades con y sin murallas El milagro de Purim El cumplimiento del precepto en la práctica El precepto de eliminar a Amalek Algunas leyes del mes de Adar
- Shabat y festividades - Shabat y festividades -

La alegría de Purim ilumina a todo el año

2 minutos para leer

La alegría de Purim ilumina a todo el año

Dado que Purim es solamente un día al año y resulta imposible enviar un ilimitado número de porciones, y tampoco se puede participar de un banquete junto a todos los familiares y amigos, surge el interrogante de a quién es mejor enviar los alimentos sabrosos, ¿al círculo cercano de amigos que se encuentran siempre a nuestro lado o justamente a personas más lejanas con quienes a veces las relaciones pueden resultar ser tensas? ¿Es mejor mandar dos envíos a amigos dilectos, o quizás diez, veinte o treinta? Lo mismo aplica para el banquete festivo, ¿es mejor realizarlo junto a la familia de uno u otro lado, o quizás con buenos amigos, o con nuevos inmigrantes? ¿Es mejor hacer un banquete para diez participantes o para cincuenta? 

La respuesta es que todas las ideas son buenas, y ese es el cometido de Purim, brindar inspiración para todo el año. Si bien en Purim no se le pueden enviar porciones a todos, gracias a la festividad podemos comprender la belleza implícita en esta práctica, de modo tal que una vez pasado Purim, a lo largo de todo el año, enviemos platillos sabrosos elaborados en nuestra cocina hogareña a amigos y conocidos. Por ejemplo, cuando se hornean jalot o se cocina algo sabroso para Shabat, se puede incrementar un poco la cantidad de lo preparado y enviar una porción o un panecillo a un amigo o amiga que pasó por una semana densamente ocupada, o a quien cumplió años en esos días, o fue aceptado a un nuevo trabajo o a quien fue despedido. De ese modo, podremos extender el acercamiento de los corazones que se vivencia en Purim a todo el año. Lo mismo respecto del banquete. En Purim podremos comer solamente con algunos de nuestros parientes y amigos, pero en virtud del regocijo que experimentaremos al comer juntos entenderemos más acabadamente el valor de la amistad y la alegría y procuraremos en mayor medida participar durante todo el año de las alegrías de nuestros familiares y amigos tales como casamientos, circuncisiones y demás encuentros de camaradería. Otro tanto ocurre con el precepto de dar presentes a las personas necesitadas, en virtud de este nos reforzaremos durante todo el año en la entrega del diezmo o el quinto de nuestros ingresos. Y en virtud del precepto de la lectura de la Meguilá como corresponde, nos reforzaremos durante todo el año en el estudio de la Torá y la comprensión de la Conducción Divina en el mundo.